martes, 7 de abril de 2015

EL “ALIETI” DE BASKET DE JESÚS GIL


El Atleti como equipo de basket ha aparecido y desaparecido varias veces desde 1922, pero es el año 1989 cuando Jesús Gil consiguió uno de sus sueños desde que llegó a la presidencia del Atlético de Madrid: abrir una sección de basket que fuera capaz de competir de tú a tú con los dos grandes del basket nacional.

Se fusionó con un equipo de la tabla media de la ACB, el Collado Villalba, por donde habían pasado, grandes jugadores como Lance Berwald o Mike Schlegel , el Atlético de Madrid-Villalba ya estaba ahí: para dar guerra.

El núcleo nacional era muy apañado en esa época con Quique Ruiz Paz y Carlos Gil, Valdivieso, García Coll, Antón Soler o Luis Barroso, Javier Gorroño y Rementería.
Jesus Gil tiró la casa por la ventana y le fichó a Clifford Luyck una pareja de americanos de escándalo: Shelton Jones, y sobretodo el increíble Walter Berry (180 millones de pesetas de 1990!). Los dos habían sido estrellas en la NCAA en Saint John's.  
Shelton no triunfó en la NBA, y Walter, aunque tuvo dos temporadas excelentes, con más de 15 puntos por partido, en los Spurs, tampoco encontró su sitio en la NBA. Así que ambos se vinieron a Europa.
Con este breve intro vamos a adentrarnos en aquel exótico y ambicioso proyecto: el "Alieti" de basket de Jesús Gil.
Tim Shea con Jesús Gil
Shelton Jones comenzó a lo grande y se tuvo que marchar por la puerta de trás, como ya comentaré cuando el Atlético de Madrid ya había cambiado de entrenador, y Tim Shea, que venía de ganar dos ligas de Portugal con el Benfica, ocupaba el lugar de Luyck, que había dejado al equipo en muy mala posición.

Os puedo decir que fue absolutamente increible el primer Atleti-Real Madrid en que Jesus Gil entró en la charla antes del partido con sus guardaespaldas, se fuera al servicio y al volver sólo dijese: "hacer lo que queráis pero ganar a estos cabrones". 
 …y Walter Berry, ya con Tim Shea en el banquillo, entendió perfectamente el mensaje de su presidente: 52 puntazos y 15 rebotes!!! le hizo a los merengues.



Acabaron la temporada en séptima posición, siendo eliminados en los cuartos de final del play off por el que acabaría siendo campeón, el Joventut.
Fue una gran temporada, ya que se clasificó para la competición europea de la Copa Korac.

Sin embargo, la temporada de Walter Berry pasaría a la historia, con sus más de 33 puntos y 11 rebotes por partido. 
Walter Berry era un jugón descomunal ya que fue un playgrounder reputado con un increible 1V1.
Su crossover brutal para su estatura , lanzamiento extraño pero mortal, su capacidad de generarse espacios, hacían de él, un jugador superlativo.
Todo ello le llevo al nº 14 del draft maldito de la NBA, donde Len Bias acabó segundo pero no debutó al morir de sobredosis, y en el que estaban otros jugadores con problemas de drogas como Chris Washburn, William Bedford o Roy Tarpley, no volvió a jugar en la ACB.
Contra el PAO de Domique Wilkins
El “Alieti” Jesús Gil acabó tristemente tras “movidas” con el alcalde de Villalba y la Comunidad de Madrid, y Walter Berry se marchó para triunfar a Grecia. Parece ser que ahora vive en un elegante barrio de New Jersey ya que lo que ahorró lo invirtió bien en varias empresas constructoras.
Pero os voy a contar como era la piedra angular de aquel equipo singular, voy a detenerme sobre todo en la figura de Walter Berry contada por su entrenador, el gran Tim Shea, y os daréis cuenta que hay o habrá  muy pocos jugadores que tengan ahora el peso que tenía este brutal jugador.


WALTER BERRY: "the truth"
Nacido en Harlem, Nueva York, y criado en los playgrounds y se matriculó en la Junior College de San Jacinto en Pasadena, Texas. Nada más llegar, dijo:
 “Si me vuelven a hacer correr 2 millas a pleno sol me marcho a casa” Ronnie Arrow, su entrenador, intentó moldear a este superdotado para el basket, con un talento innato extraordinario para anotar y coger rebotes…pero no había manera con el carácter de Berry, que su premisa era hacer lo que fuera con el mínimo esfuerzo...y si no, no se hacía.
“En cuanto a talento, no veo en Walter diferencia alguna con Hakeem Olajuwon o Michael Jordan. La única diferencia está en su intensidad” llegó a decir  Arrow .
Intensidad y Berry son palabras que nunca cuadraron…
Iba tan sobrado técnica y físicamente que pensó que no necesitaba entrenar, y así fue: siempre encontraba una lesión ficticia para abandonar el entrenamiento.


En su etapa en San Jacinto promedió 28,4 puntos y 14, 5 rebotes y batío records, como el de 13 tapones un partido con partidos para alucinar, como el disputado contra el St. Philips College de San Antonio, en el que logró 38 puntos y 30 rebotes .
Casi no entrenaba y fue nombrado: National Junior College Player of the Year. El disparate!


En 1984 jugó en St. John´s con la megaestrella Chris “Chaqueta Metálica” Mullin  y ser entrenado por el mítico Lou Carnessecca .




















En su primer año contribuyó de manera decisiva a que jugaran la Final Four con 17 puntos y 8,7 rebotes por partido y siendo el segundo máximo anotador del equipo tras Mullin. Palabras Mayores ¿no?
En su segundo año se fue a los 23 puntos y 11.1 rebotes por partido. El equipo no llegó lejos, pero él sí. Se llevó casi todos los premios individuales.
“The Truth” se presentó al draft de 1986, siendo elegido en el puesto 14 por los Portland Trail Blazers.

Walter quedó muy decepcionado al no ser de los 3 primeros del draft, que por calidad era pleno merecedor, peroen la NBA ya conocían como “trabajaba” o mejor dicho como no trabajaba…

En su mejor temporada en la NBA, la 87-88, promedió con los Spurs 17,4 puntos y 5,4 rebotes en poco más de 26 minutos por partido. Vistió el uniforme de los Portland Trail Blazers, San Antonio Spurs, New Jersey Nets y Houston Rockets. 

Se fue a Italia, a ver si no le hacían correr… y jugó durante la temporada 1989-1990 en el Paini de Napoles donde promedió 29,6 puntos y 11,5 rebotes por partido.

Walter Berry era un anotador inmisericorde de 2,05 que podía jugar de 4 o 5 de forma que conviniera en ese momento en la cancha con una facilidad innata para buscar la canasta dentro de la pintura y un reboteador alucinante, realizaba movimientos electrizantes con los que parecía que no sudaba y sobretodo que no se esforzaba…y era así!

Era zurdo-zurdo, no usaba la derecha en casi ningún movimiento y encestaba todo, excepto en los tiros de tres que nunca intentaba.

Lo que nadie sabe, es hasta donde hubiera llegado el bueno de Walter si hubiera entrenado…


¿QUE PENSABA TIM SHEA DE BERRY?

























Era su jugador favorito y os dejo el extracto de una entrevista realizada al ex entrenador del Atleti:

“Walter, como Andre Turner, no era un jugador … era un artista. Desde el Bronx, Walter había perfeccionado un juego muy, muy difícil de parar e imposible de defender uno contra uno; si era capaz de llegar a la zona era canasta segura, con unos movimientos que, hasta hoy día, no han sido vistos en ninguna otra parte. Un reverso de malabarista dejaba a todos con la boca abierta. No era un gran tirador pero entendía de espacios y adversarios perfectamente.
Como persona era dócil y amable. Con Walter y con la ayuda de Luis Rodríguez aprendí a usar mi "left hand". Walter no era el mejor en el trabajo diario. Mientras Walter ganaba su confianza en mi, mejoraba su rendimiento diario ... Era tranquilo, respetuoso y atento con las personas de su alrededor. Amaba su Rolex lleno de diamantes, hasta que lo que dificultaba ver la hora, y en cada entrenamiento, el mismo ritual: una vez en la cancha se quitaba el reloj con cuidado, lo colocaba dentro de una pequeño bolsa-joyero y me lo entregaba para su cuidado. Por muchos detalles, Walter, hacía que me sintiese como en mi barrio.”

El gran Quique Ruiz Paz con el maestro Corbalán.
-Los esquemas de juego en ataque empezaban y acaba en Berry, ¿no quedaría otra opción?
Mandaba “Kiki” (Quique) Ruiz Paz ... esto era lo que Walter esperaba. Walter y Kiki eran casi perfectos. “Kiki” siempre imponía el ritmo y orden, era un gran base... un hombre de carácter. Era el corazón del equipo … y yo siempre quedaba sorprendido de lo bien que leía los partidos. Lo bueno de este equipo era su defensa y su carácter. 

Walter no era un buen defensor en uno contra uno pero si muy listo y ágil en la defensa de ayudas. Nuestra "firma", nuestra arma secreta, era ¡Carlos Gil! Walter y Carlos tenían "su jugada" favorita y decisiva al final de los partidos apretados. 

Walter con el balón penetrando o en el post bajo, forzando una defensa dos contra uno interior y sacando el balón a Carlos para el tiro decisivo. Al final, Walter ganaba el partido con asistencias. Carlos era un gran tirador. Por lo menos de 3 a 5 partidos se ganaron con este Modus Operandi. “


Y ESTALLÓ EL ESCÁNDALO CON SHELTON JONES…

Con un jugador tan espectacular como Shelton Jones, el “Alieti” de Jesus Gil tenía una dupla de americanos brutal . Shelton con 2,06 m también al igual que Walter, tenía unas capacidades atléticas prodigiosas, siendo dunker de 1er orden ,un muy buen anotador, y con una polivalencia extrema que le podía hacer jugar de 2,3 y 4. Empezó como un cohete pero... habían demasiados actores principales en un guión para una estrella..

El bueno de Tim lo cuenta:

Shelton fue compañero de Walter en St. John´s durante tres años. Eran las estrellas. Shelton tenía envidia de Walter y persistía intentando imitarle. Esto se convirtió en un problema durante los partidos. 
Un ejemplo: Walter hacía una buena jugada, tal vez una espectacular, entonces Shelton al tratar de hacer exactamente igual se salía del guión por su propio afán de imitación. 
La gota que colmó el vaso fue cuando en un entrenamiento, una mañana muy muy fría de Villalba, Shelton se negó a entrenar, pues había olvidado sus gafas de protección habituales que no le impedían tirar o hacer entrenamiento sin contacto. 
Berry se entrenaba con guantes, pero Shelton, sencillamente, no quería entrenarse, del frío que tenía. 

Aquel año, Shelton había ganado el Concurso de Mates, pero Jesús le llamó al despacho del Club Financiero y le dijo, delante mía: "Eres un negro de m... y ahora mismo te vas a tu p... casa". Y trajimos a Howard Wright, algo peor que Shelton, pero que hacía su trabajo.

Tuvimos la suerte de encontrar a Howard Wright, que era grande, fuerte, honesto, sincero y un duro, duro trabajador. Llegaba temprano y era el último en irse de los entrenamientos, lo que supuso un efecto contagioso para el equipo haciéndonos aún mejores y más sólidos. "


Aún así el bueno de Shelton guarda muy buenos recuerdos de su experiencia en Villaba:




"La ciudad de Villalba me trató como si fuera de la familia. Recuerdo a la gente animando al equipo cuando iban las cosas bien y cuando iban mal. No les olvidaré. El Atlético fue mi primer trabajo real en Europa. Tener a Walter al lado mío me ayudó mucho. Mi mejor recuerdo es el inicio de temporada, cuando él estaba lesionado y yo jugué en su papel los 3 o 4 primeros partidos. Recuerdo promediar sobre 30 puntos y 10 rebotes. Esta experiencia me enseñó que yo podía tener éxito como extranjero principal en cualquier equipo de Europa. Eso me llenó de confianza, aunque no terminé la temporada y Jesús nunca me pagó todo lo que quedaba de mi salario. Todavía pongo en lo más alto a Villalba entre mis experiencias europeas. Gracias a los seguidores y a tener a mi compañero Walt conmigo"

Como podeis habeis leido más arriba era un vestuario “algo” tenso al principio. Los nervios y tal y tal...
En fín, por lo que podeis leer Walter Berry era un genio y figura,jugador único y maravilloso, capaz de asombrar a cualquiera ,de desquiciar a rivales y a alguna “estrella” compañera de equipo por querer imitarle.

Cientos de anécdotas en torno a su  aparentemente “cansina” figura salen por doquier como la de recorrer 40 km sin ver las marchas en un Mercedes europeo y queme el motor por ir solo con la primera marcha…las cosas del bueno de Walter, pieza angular del “Alieti” de Jesús Gil.

Aquí os dejo un reportaje sobre la llegada de Walter Berry y Shelton Jones, donde describe a la perfección las máximas espectativas depositadas en ellos, y sus alucinantes cualidades para el basket. es una delicia:




En el verano de 1991, como ya mencioné en la cabecera del post, todo acabó. Así es como desapareció el “Alieti” de basket …¿volverá de nuevo? Quién sabe…


Bibliografía :
Muchas gracias a la información y declaraciones de los protagonistas recopiladas en:

El excelente artículo del crack de Quique Ruiz Paz  ¿Porque era tan bueno Walter Berry?   publicado en Solobasket.com

El completísimo artículo de Igor Minteguia publicado en Solobasket: "El atlético de Jesús Gil llega a la ACB"

En entrevista a Tim Shea publicada por Alejandro Delmás en As.com



Publicado por @basketatodoritm


Salu2 anelkianos

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